Gobernar por decreto 16/01/2018 El macrismo quiere validar los decretazos que cambian decenas de leyes. Como la Constitución lo prohibe, tiene un recurso al que siempre apela: hacer trampa, corromper y violar la ley. Cambiemos busca tener mayoría en la comisión que debe dictaminar sobre la validez de los DNU presidenciales Arman la estrategia para gobernar por decreto El oficialismo busca tener mayoría en la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo, que debe dictaminar sobre la validez de los decretos. Ocurre después del DNU que derogó 19 leyes y que la oposición quiere rechazar por inconstitucional. Por Miguel Jorquera Mientras el Gobierno busca blindar la comisión Bicameral Permanente de Trámite Legislativo con una mayoría oficialista para dictaminar a favor de los decretos presidenciales, en la oposición parlamentaria crece el malestar y la resistencia contra el mega DNU con que el presidente Mauricio Macri derogó 19 leyes y modificó otras 140 marginando al Congreso de la discusión legislativa que le corresponde por mandato constitucional. La bancada de diputados del Frente para la Victoria (FpV-PJ) ya manifestó su rechazo a la medida que tildó de inconstitucional. El massista Frente Renovador adelantó que no permitirán que el Presidente “gobierne por decreto cómo lo hizo en la Ciudad de Buenos Aires” y también alienta su rechazo. En tanto, el interbloque Argentina Federal, referenciado en los gobernadores peronistas, trabaja en una postura unificada entre diputados y senadores sobre la base de un documento que plantea que “el mega DNU atenta contra el rol del Congreso y la transparencia”. Si la oposición logra unificar sus posturas en ambas Cámaras legislativas reuniría las manos suficientes para rechazar el DNU con que Macri busca sortear el Parlamento para gobernar sin sobresaltos. En sintonía con los objetivos presidenciales, Cambiemos adelantó su jugada en el Congreso: blindar la bicameral de DNU con una mayoría oficialista que hasta ahora no contaba. El puntapié inicial lo dio la Cámara de Diputados, donde su presidente, el macrista Emilio Monzó, repartió los 8 asientos que le corresponden a los diputados en la bicameral por sistema D’ Hont, lo que le permitió quedarse al interbloque oficialista con 5 lugares (los macristas Pablo Tonelli y Ezequiel Fernández Langan, los radicales Luis Petri y Martín Hernández, y el lilito Fernando Iglesias). Mientras Cambiemos representa el 42 por ciento del total de la Cámara baja, su presentación en la bicameral alcanza el 62 por ciento de sus integrantes. De nada sirvió el “pataleo” del FpV-PJ, que como principal bancada opositora se quedó con apenas dos lugares (Marcos Cleri y Máximo Kirchner) y el restante fue para el interbloque de Argentina Federal (Pablo Kosiner), que logró arañar el piso del sistema de reparto. La mayoría de Diputados le permitirá equilibrar un reparto más equitativo en el Senado, donde Cambiemos tendría tres integrantes en la bicameral, la misma cantidad que el del bloque Argentina Federal que conduce Miguel Angel Pichetto. En tanto, la bancada cristinista FpV-PJ tendrá una silla, igual que el interbloque Federal de Adolfo Rodríguez Saá. Aunque los lugares quedarían empatados (8 para el oficialismo y 8 para la oposición), Cambiemos se asegura el desempate del presidente de la Bicameral –que es rotativo pero este año le corresponde al oficialismo– y con ello garantiza los dictámenes a favor de los DNU presidenciales. Pero que esta vez no le alcanzaría para ratificar en el recinto los votos necesarios para su respaldo del mega DNU de Macri. Otras cuentas El Ejecutivo tiene diez días hábiles para enviar el DNU al Congreso, el mismo tiempo que dispone la Bicameral para expedirse para luego ser ratificado por una de las dos Cámaras. En cambio, su rechazo debe ser confirmado por los plenos de ambas Cámaras legislativas. A eso se refería el jefe del bloque de diputados del FpV-PJ, Agustín Rossi, cuando afirmó ante PáginaI12 que “todo dependerá como reaccione la oposición” frente a lo que definió como “la burla del presidente Macri al Parlamento atravesando la esfera de división de poderes”. Al tiempo que propuso la convocatoria una sesión especial de la oposición para rechazar el mega decreto que consideró “inconstitucional”. La gambeta al Congreso también desató las críticas de otros sectores de la oposición. En el massismo se sumaron varios pronunciamientos por el rechazo. “No vamos a permitir que Macri gobierne por decreto evitando el Congreso como lo hizo durante ocho años cuando fue jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires”, dijeron a este diario voceros del bloque de diputados del Frente Renovador. “¿Cuándo lo firmó si estaba de vacaciones? ¿Se lo llevaron en avión al Sur? Para nosotros eso es lo mismo que cuando le llevaban los diarios en avión a Cristina Kirchner en Santa Cruz”, se preguntaron y contestaron los voceros del Frente Renovador, una manera de marcar también distancia con el kirchnerismo. La socia de Sergio Massa en el frente electoral 1País, Margarita Stolbizer, también se había pronunciado en contra debido a la “inconstitucionalidad” del mega decreto y adelantó que presentará un amparo judicial desde la flamante ONG Bajo la Lupa, que armó para actuar desde el llano ya sin su banca. Desde el Bloque Justicialista y el núcleo mayoritario del interbloque Argentina Federal emitieron un comunicado bajo el título “el mega DNU atenta contra el rol del Congreso y la transparencia”. “El Gobierno tiene que respetar el debate parlamentario, no se puede saltear al Congreso de la Nación en una reforma que contempla áreas verdaderamente sensibles para el funcionamiento del Estado y el futuro de los argentinos”, dice uno de los párrafos que difundieron sus diputados, que apuntaron a las modificaciones que introduce el DNU en el Fondo de Garantía de Sustentabilidad que sostiene el sistema provisional. “Estas modificaciones no conducen a un Estado menos burocrático sino que intentan alterar estructuras legales de transparencia y responsabilidad estatal que son elementales”, afirman los diputados que ahora trabajan en diseñar una estrategia conjunta con el bloque de senadores que conduce Pichetto que ponga freno al DNU de Macri. Si los senadores de Argentina Federal adoptan la misma postura que sus diputados, el mega decreto presidencial sería rechazado con la mayoría opositora en ambas Cámaras y perdería inclusive el reaseguro que el oficialismo afirmaba contar en el Senado ante una posible embestida opositora en al Cámara baja. La suerte de la decisión de Macri de avanzar en sus reformas estructurales por decreto no está todavía garantizada para el Gobierno en el Parlamento. Fuente: Página 12. Link. Imagen: http://es.blastingnews.com. Comparte esto:TwitterFacebookWhatsAppMe gusta esto:Me gusta Cargando... Hacer Comentario Cancelar RespuestaSu dirección de correo electrónico no será publicada.ComentarioNombre* Email* Sitio Web Guarda mi nombre, correo electrónico y web en este navegador para la próxima vez que comente. Current ye@r * Leave this field empty Δ