Narco, pero aún no investigado en EEUU, Diego Santilli, el reemplazante de Espert en La Libertad Afana, tiene un entramado de sociedades offshore, no declaradas, que lo inhabilitan para ser diputado.

El reemplazo de Espert: vinculan a Santilli con 14 sociedades comerciales y dos paraísos fiscales

El diputado llega con un prontuario difícil de ocultar: lo vinculan a 14 sociedades comerciales, entre ellas dos radicadas en paraísos fiscales, lo que alimenta las sospechas de evasión y maniobras de ocultamiento patrimonial.

La caída de José Luis Espert por el narcoescándalo junto a Fred Machado abrió la puerta a un posible sucesor en la Provincia de Buenos Aires: Diego Santilli. Sin embargo, el diputado llega con un prontuario difícil de ocultar: lo vinculan a 14 sociedades comerciales, entre ellas dos radicadas en paraísos fiscales, lo que alimenta las sospechas de evasión y maniobras de ocultamiento patrimonial.

El ex PRO y actual referente de La Libertad Avanza construyó en redes una imagen de paladín contra la corrupción, abanderado de la iniciativa “Ficha Limpia”. Pero la documentación recientemente expuesta lo muestra en la vereda opuesta: un entramado de empresas familiares, estructuras offshore y declaraciones patrimoniales que no cierran.

Un esquema familiar bajo la lupa

Entre las sociedades detectadas aparece Lakerise Internacional Limitada, registrada en 2006 y dedicada al alquiler de propiedades, pero nunca inscripta en el organismo tributario nacional. Su hermano, Darío César Santilli, figura como CEO de South Tourin LLC, creada en 2014 en Florida, que comparte dirección con otras firmas armadas por gestores especializados en paraísos fiscales. Incluso la madre del legislador, inscripta apenas como monotributista, aparece involucrada en un círculo empresarial que resulta incompatible con ese perfil impositivo.

El nombre de Santilli no es nuevo en este terreno: ya en 2021 había sido señalado en la investigación global Pandora Papers, que expuso a políticos y empresarios con cuentas y sociedades ocultas en el extranjero. Consultado en 2018 sobre estas prácticas, llegó a justificarlas con un polémico: “Es normal, todo el mundo lo hace”.

De acusador a acusado

El escándalo de Santilli estalla en un contexto donde otros referentes opositores, como Cristian Ritondo, enfrentan acusaciones por enriquecimiento ilícito. La paradoja es evidente: quienes pretendían presentarse como símbolos de transparencia terminan enredados en un historial turbio de sociedades offshore, familiares involucrados y negocios en las sombras.

Ahora, con la posibilidad de encabezar la lista en PBA tras la salida de Espert, la pregunta es inevitable: ¿es Santilli la cara de la renovación política o simplemente otro capítulo de la vieja política de privilegios y opacidad?

Fuente: Primereando. Link. Imagen: Página/12.

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