Platita para los milicos de la dictadura

Macri saca la plata de los hospitales para darle retroactivos a milicos de la dictadura. Y eso que varios ya son funcionarios de su gobierno.

La indemnización que dispuso Aguad alcanza a un militar designado por Cambiemos en Transporte

El premio también es para funcionarios

La compensación salarial a militares que habían sido pasados a retiro en 2010 por su escaso apego a la democracia incluye a un director de la Agencia de Seguridad Vial, Roberto Augusto Vega, quien reivindicó la lucha de la dictadura contra “el terrorismo apátrida”.

Por Werner Pertot

Lo que comenzó como una indemnización a familiares de genocidas se está convirtiendo rápidamente en un premio a los propios funcionarios. Al menos uno de los militares a los que el ministro de Defensa, Oscar Aguad, le otorgó una indemnización por haber sido dado de baja durante el kirchnerismo es actualmente funcionario del Gobierno de Cambiemos. Se trata del teniente coronel Roberto Augusto Vega, quien es director de Patrimonio y Servicios de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, por lo que cobra un sueldo bruto de 64 mil pesos. Vega es el mismo que en un acto de jura de la bandera en 2005 sostuvo ante los soldados que se había librado una lucha “contra el terrorismo apátrida que pretendía cambiar la bandera por un trapo rojo”.

El ministro de Defensa anuló una resolución de 2010, de la época de Nilda Garré como ministra, en la que se había pasado a retiro a 25 militares. Aguad sostuvo que en aquel momento no se los había ascendido por “portación de apellido”, es decir, por ser familiares de genocidas. Garré le salió al cruce: “La decisión de no ascenderlos no fue por ‘ser hijos de’, sino porque ellos no manifestaron conductas democráticas”. Garré insistió en que tenía la responsabilidad de elegir a los militares que iban a conducir a las Fuerzas Armadas en democracia —de eso se trataban los ascensos— y que éstos no daban con ese perfil por sus acciones y manifestaciones y no por sus vínculos sanguíneos.

Aguad dispuso que se les reconocieran los últimos ocho años como si hubieran estado en actividad y se les pagara la diferencia salarial. Ayer, por segundo día consecutivo, el Ministerio de Defensa se negó a informar a este diario cuál es el monto total de dinero involucrado en las indemnizaciones que fijó Aguad. También resolvió que se buscará ascenderlos en forma retroactiva, aunque esa decisión involucra enviar sus pliegos al Senado. Habrá que ver si los senadores aceptan votar un “ascenso retroactivo” para militares que fueron pasados a retiro, por segunda vez, por Aguad en la misma resolución en la que les dio una suerte de indemnización.

Lo que omitió Aguad es que algunos de esos militares están hoy trabajando con Cambiemos: fuentes conocedoras del sector militar señalaron que, en particular, los marinos retirados se sumaron a las filas de Macri. PáginaI12 logró dar con uno de los ex integrantes del Ejército que es actualmente funcionario en la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), que depende del Ministerio del Transporte.

Se trata del teniente coronel Roberto Augusto Vega, veterano de la Guerra de Malvinas y licenciado en Estrategia y Organización y oficial retirado del Estado Mayor del Ejército. Según confirmaron en el Gobierno, actualmente es director dentro de la ANSV del área de Patrimonio y Servicios, con un sueldo bruto de 64.500 pesos. No obstante, Vega no está designado como funcionario sino contratado y su sueldo no equivale al de un director nacional.

El teniente coronel Vega recibió una sanción en 2005 cuando dio un discurso en la ceremonia de juramento de la bandera ante los soldados que estaban recibiendo instrucción. Como su superior, les dijo a los futuros oficiales, mientras señalaba la bandera argentina: “¡Mírenla bien! Porque es la misma bandera por la que varios soldados llevan grabadas en sus cuerpos las heridas recibidas peleando en Manchalá, contra el terrorismo apátrida que pretendía cambiarla por un trapo rojo”. Manchalá fue un enfrentamiento en mayo de 1975 con el ERP del Comando Táctico de Famaillá. En esa parte de Tucumán comenzó a funcionar el primer campo de concentración de la Argentina.

En la misma Agencia de Seguridad Vial designaron en octubre al ex capitán de corbeta Alberto Daniel Bertrán, quien estuvo involucrado en una causa por torturas a soldados en la base naval de Puerto Belgrano en diciembre de 2004. Los soldados fueron obligados a quedarse sentados en una zanja por la que circulaba agua hirviendo, por lo que todos recibieron quemaduras de distinta gravedad en las piernas, los glúteos y los genitales y terminaron internados en el Hospital Naval. Según publicó en su momento el diario Clarín, una de las víctimas dijo en el expediente interno que quienes ordenaron el “baile” fueron “el jefe del departamento de cursos de la Escuela de Infantería de Marina, capitán de fragata Alejandro Daniel Pereyra, y el comandante de los Anfibios, capitán de corbeta Alberto Daniel Bertrán”. En el Ministerio de Transporte aclararon que Beltrán fue sobreseído por el Poder Judicial en 2009 en esa causa y que, por lo tanto, no ven objeciones para su designación como director de Control y Fiscalización Vial de la ANSV. Por cierto: el otro mencionado como presunto responsable de las torturas es hoy el director de Seguridad del partido bonaerense Coronel Rosales, que comanda el intendente de Cambiemos Mariano Uset.

El director ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial es Carlos Pérez, también un militar retirado que, como publicó este diario, acompaña a Macri desde que asesoró en la formación de la Policía Metropolitana al comienzo de la carrera política del actual Presidente. Pérez trajo a sus camaradas de armas a la gestión. Y uno de ellos fue premiado por Aguad con una indemnización cuyo monto los contribuyentes desconocen.