Se cayó otra opereta del gobierno. Una más y van… No está en Entre Ríos, ni en Mendoza, ni en Chile, ni lo acuchilló el puestero.

El perfil genético de la persona herida el 21 de julio no coincide con el de Santiago Maldonado

El ADN terminó con la operación del puestero

Contra todos los testimonios de testigos, la pista sugerida por el Gobierno sostenía que Maldonado no estaba en Cushamen el 1 de agosto y que había sido herido antes. Pero el análisis realizado por la UBA determinó que Maldonado no fue el acuchillado.

Por Adriana Meyer

Sus amigos y su mamá hablaron con él, sus vecinas de El Bolsón bailaron con él durante el último fin de semana de julio, los mapuches de la Pu Lof en Resistencia de Cushamen estuvieron con él y declararon que se lo llevó Gendarmería durante la represión del 1 de agosto, y su familia lo identifica en un video filmado sobre la ruta 40 pocas horas antes. Sin embargo, para la Justicia recién ayer quedó descartada la posibilidad de que Santiago Maldonado fuera acuchillado el 21 de julio por un puestero de Benetton en la localidad de Epuyén. “El juzgado federal de Esquel comunica  que el Servicio de Huellas Digitales Genéticas de la Facultad de Farmacia  y Bioquímica de la UBA informó que el perfil genético de la persona que habría sido herida el 21 de julio de este año durante el ataque sufrido por Evaristo Jones en cercanías de Epuyén en la provincia del Chubut no tiene coincidencia con el perfil genético de un hijo biológico de Enrique Aníbal Maldonado y Stella Maris Peloso”, reza el comunicado oficial emitido por el juzgado a cargo de Guido Otranto. 

A pesar de la oposición de la abogada de la familia, Verónica Heredia, a que las muestras fueran cotejadas en otro expediente penal por afuera del que investiga la desaparición de Maldonado, la Justicia de Esquel siguió considerando la hipótesis preferida de los funcionarios macristas, a la hora de hacer declaraciones públicas y abonar la campaña de defensa de la Gendarmería y de ataque contra la comunidad mapuche. Esto es, Maldonado no estuvo el día de la feroz represión en Cushamen porque había sido herido el 21 durante un supuesto ataque de la RAM, que sería la Resistencia Ancestral Mapuche, cuando el capataz de una de las estancias del empresario Benetton, Evaristo Jones, se defendió con un cuchillo. Estas versiones que el Gobierno comenzó a difundir a partir del 20 de agosto tenía a Santiago como activista de la RAM, acuchillado por Jones en su intento de defenderse mientras le incendiaban la casilla.

Página 12 publicó el relato de María Parodi y Facundo Herrera Aquino, quienes estuvieron con el joven en El Bolsón, en una peña el 27 y en un evento de rap femenino el 28. “Era patadura pero quería aprender a bailar chamamé”, dijo Parodi. Además, este diario también accedió a la declaración de los padres de Maldonado el 25 en el juzgado de Mercedes, cuando entregaron sus muestras de ADN y dijeron que habían hablado el 27 con su hijo, quien no había manifestado tener herida alguna. Además, también habló por teléfono con Santiago su amigo Ariel Garzi, quien relató que le expresó su deseo de visitar la comunidad mapuche en Cushamen a los pocos días. Garzi, uno de los testigos del expediente que instruye Otranto, había pedido protección por el hostigamiento policial que viene sufriendo tras la feroz represión del 10 de enero en esa misma Pu Lof, pero quedó expuesto por la propia ministra Patricia Bullrich, que dio sus datos públicamente. 

Pocos días más tarde el propio Jones descartaba ante los medios haber herido de muerte a su atacante. “No fue una herida profunda, apenas un corte o un puntazo”, dijo. 

Así, ayer se esfumaron las esperanzas en la “pista” a la que el Gobierno le ponía fichas en su persistente defensa de la actuación de la fuerza de seguridad predilecta a la hora de reprimir la protesta social, tanto en Capital como en el resto del país. La información oficial del juzgado dilapidó esa versión sobre el episodio en Epuyén, contrapuesta a los testimonios y las pruebas del expediente que la propia fiscal federal Silvina Avila puso en duda en su informe al Gobierno, pero que fueron verosímiles para que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos dictara medidas cautelares para que la administración macrista dé con el paradero de Maldonado. “La voz de las víctimas, la familia y los mapuches, se refuerza a pesar de todos los intentos de restarles credibilidad”, dijo a PáginaI12 una de las querellas. 

El juzgado de Esquel informó que sigue realizando los análisis de las muestras biológicas halladas en los vehículos de Gendarmería, en las  prendas que pertenecerían a Maldonado y en la vivienda en la que residió en El Bolsón.

Fuente: Página 12. Link.

Hacer Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada.