Clarín, La Nación y la banda delictiva de esas cadenas de medios replicaron a Wiñazki (h) en su invención de una escucha que no existe. Si existiera, sería ilegal difundirla, pero eso ya es una sofisticación ante tamaños asaltantes.

Wiñazki, igual de farsante que Lanata. ¿Academias Magnetto?

La Nación llegó al escándalo periodístico de dar “la noticia” y luego aclarar que no le consta que exista tal escucha.

El grotesco de estos delincuentes de la pantalla no se detiene. Algunas veces, incluso, sus mentiras tienen sentencia judicial.

El mismo Lázaro Báez, preso, extorsionado, apretado por la AFI macrista, amenazada su familia por el gobierno y los medios que actúan como grupos de tareas, desmintió la farsa.

Imagen: LMNeuquen.com.

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