Con tácticas de guerra contra el pueblo, el macrismo mendocino reprimió de modo salvaje el rechazo popular a la decisión del gobernador Suárez de habilitar el cianuro para la minería. Infiltró policías en la marcha para producir desmanes.

Gases, balas de goma y detenidos

“Nos detuvieron los mismos policías de civil que se infiltraron en la marcha para hacer lío”

En medio de un operativo represivo de balas de goma, gases y cacería de manifestantes de la Marcha del Agua, la policía detuvo un grupo de personas -ascendería a 16- en la comisaría Tercera. Uno de los jóvenes que fue liberado horas después, contó que los detuvo policía de civil que minutos antes había intentado organizar disturbios en la marcha.

Julieta Lavarello, del equipo de abogados de las Asambleas por el Agua Pura de Mendoza, fue una de las detenidas este lunes en la comisaría Tercera tras la multitudinaria Marcha del Agua que confluyó en Casa de Gobierno.

Lavarello, según informó su madre en radio La Mosquitera, fue llevada al calabozo junto a un grupo de vecinos que se manifestaron este lunes en Capital después de transitar más de 100 kilómetros desde el Valle de Uco hasta la Casa de Gobierno, donde exigieron que se veten las reformas a la Ley 7722, que le abrieron el grifo al cianuro y otros tóxicos en la minería de Mendoza.

Ni vecinos, ni asambleístas, ni agricultores. Infiltrados esperando para entrar en acción.

“Había infiltrados de investigaciones”

Cerca de las 17 fueron liberando detenidos. Uno de ellos, Sebastián, dio su testimonio en radio comunitaria Cuyum: “Estábamos en el Parque Cívico, habíamos identificado a unos infiltrados y nos dimos cuenta que eran de Investigaciones. Fuimos pidiéndoles de a uno que se fueran, no se fueron. Entonces les empezamos a cantar para que se pudieran ir. Lo logramos”.

Siguió: “Fuimos a cargar agua para el mate como a una cuadra de la manifestación y nos los encontramos en la esquina y esos mismos y nos detuvieron. Nos agarraron y nos dijeron ‘te vamos a hacer pasar la navidad acá’. Esperaron un móvil, nos trajeron a la Tercera, nos llevaron a Sanidad, y nos volvieron a la comisaria tercera. La sacamos barata porque llegaban chicos con heridas y golpes en la cara y patadas”.

Mingorance, el vocero del desplante

La represión se desató después de que Humberto Mignorance, secretario de Minería, saliera en modo vocero de Suarez a decir que el Gobierno no daría marcha atrás con las reformas de la Ley 7722.

Después de esa declaración, “aparecieron unos grandotes todos tapados a tirar piedras”, contó una de las vecinas reprimidas en radio La Mosquitera.

Pelotones de infantería ganaron la explanada de Casa de Gobierno, y a partir de allí dispersaron la Marcha del Agua a puro balazo de goma y gases lacrimógenos. Después detuvieron a asambleístas a granel y los llevaron a la Comisaría Tercera.

Fuente: Explícito. Link. Imagen: Página/12.

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