Lavar a los amigos y ensuciar a los enemigos

La Unidad de Información Financiera, el organismo que debería combatir el lavado de dinero, está copado por lavadores. Especialistas. Ocultan, encubren, facilitan el lavado y la fuga y persiguen a la oposición.

Su vicepresidente, María Eugenia Talerico, proviene del HSBC, el banco más involucrado con el lavado de activos. El lunes 6 se cumplieron 3 años del incendio de Iron Mountain que costó la vida de 8 bomberos y 2 rescatistas. Fue intencional. Todo indica que se hizo para destruir documentos con los que habría trabajado Talerico. El incendio no hubiera sido posible sin la anuencia de Juan José Gómez Centurión, Francisco Cabrera y el mismo Mauricio Macri, que desde el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires facilitaron la logística.

Cabrera, Gómez Centurión, Talerico y su tendencia pirómana

En la UIF, además supervisa el trabajo, María Pía Monkes Calcaterra, la prima y empleada del mismísimo Mauricio. La prima está procesada en España y República Dominicana por los desfalcos de las empresas de Macri.

Por supuesto, semejante organismo, tales funcionarios se dedican a facilitar los enjuagues y lavados de su gente y como todo el gobierno macrista a hostigar a los opositores.

El 13 de enero Debate Mendoza te contó cómo la UIF se negó a investigar a Gustavo Arribas. El hecho fue así: la UIF recibió el reporte por operación sospechosa de lo que luego se conoció como el escándalo Odebrecht. La UFI, lo ocultó y lo cajoneó. 

VER.

Cuando salió a la luz que habían escondido el reporte, el organismo emitió un comunicado en que reta a los periodistas y sostiene que ellos guardan secreto sobre sus investigaciones.

VER EL COMUNICADO DE LA UIF

La nota aparecida en Clarín es otra desmentida a un gobierno que engaña con una desfachatez que no se conocía en Argentina. 

El macrismo hace de los organismos del Estado una estructura para delinquir y perseguir la oposición política. La UIF es la prueba más patente.

NOTA EN CLARÍN.